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El mercado es tan amplio y la individualidad tan perseguida, que desarrollar un vehículo con pasión justifica no solo el desarrollo del mismo, sino que genera ventas.
¿Para qué quiero un motor sobrealimentado y una caja de doble embrague en mi coche de diario?
R = Para vivir…
Hay lógicas que no tienen sentido, por estúpido que parezca el comentario, pero la realidad de las cosas es que el mercado es tan amplio y la individualidad tan perseguida, que desarrollar un vehículo con pasión justifica no solo el desarrollo del mismo, sino que genera ventas; ese pequeño margen que las compañías necesitan para acompasar su crecimiento y afianzar su liderazgo.
En el caso de esta prueba de manejo, no me imagino a una familia disfrutando del perfil agresivo de un Soul SX con 202 caballos de potencia producto de la generación de un motor sobrealimentado denominado T-GDI, pero sí la visualizo paseando durante el fin de semana sin reconocer que lo que se esconde debajo del capó procede del Veloster, que quizá llegue a nuestro país más pronto de lo que esperamos.
Adicionalmente la gestión de potencia se lleva a cabo gracias a una caja de doble embrague y 7 relaciones, que ofrece diferentes modos de manejo para gestionar la potencia y mejorar los consumos de combustible de acuerdo a la situación en la que usted se encuentre, o prefiera manejar.
Con respecto a los números internacionales oficiales, el vehículo baja los 8 segundos en aceleración de 0-100 km/hora, lo cual no pudimos constatar por las condiciones de tráfico que encontramos en la Ciudad de México. Pero sí le aseguro que la reacción es buena, directa y divertida, llevándonos a una experiencia que roza entre manejar un SUV, aunque no lo sea, y un compacto deportivo, aunque tampoco, ¿entonces qué es el Soul? Es un monovolumen compacto de 5 plazas.
En cuanto al paquete estético apuntamos que recibe fascia y parrilla más agresivas, además de rines de 18 pulgadas y pintura exterior bi-tono para lucir más convincente. En el interior destacamos el buen uso de los materiales, ya que la sujeción de los asientos se da gracias a la combinación de tela y simulación de piel, la cual destaca por los pespuntes en diferente color.
El sistema de infoentrenimiento es bueno, aunque un poco difícil de manipular, cabría mejorar la cámara de visión trasera, que no ofrece la mejor visibilidad cuando es época de lluvia, pero cumple. En seguridad tenemos toda la farmacia con 6 bolsas de aire y todas las asistencias: frenos ABS, control de tracción y estabilidad, además de un reconocido certificado contra choques.
Ya en camino los modos de manejo sí se sienten, y quizá quien escribe peca de no utilizar frecuentemente el modo ecológico, pero la verdad es que sí baja el consumo de manera dramática, sacrificando la respuesta del motor (por eso mismo no lo uso). En «sport» podemos disfrutar de la buena ingeniería que se desarrolló con la caja de transmisión y la puesta a punto del turbocargador, que libera «power» para hacer rebases y manejar de manera ágil, tanto que los «vecinos» no esperaban que un pintoresco Soul les dejara parados en los altos o los rebasara en la subida a Santa Fe, Ciudad de México. Una de las víctimas fue un GLA 200, que si bien no tiene 200 hp para presumir, sí una estrella que luce también el equipo campeón de la F1.
Precio, todavía no tenemos información oficial, pero estará debajo de los $400,000 pesos. Respecto a la competencia es difícil saberlo, pues por potencia y espacio podríamos incluirlo frente a un Forester de Subaru o Tiguan de Volkswagen, pero no es un SUV y tampoco cuesta lo que éstos. Más bien diríamos que robará mercado de los entusiastas de un hot hatch que arrancan una familia y que no desean perder esa emoción de una suspensión más rígida de lo normal y acentos deportivos.
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