G-Power son unos preparadores alemanes que en general se especializan en “tunear” a la marca BMW, y la especialidad de ellos no es tanto estética, sino funcional, vamos le cambian las “tripas” a los autos para llevarlos a nuevos niveles de prestaciones, como en el caso del BMW M3 GTS que ya era rápido.
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Para esta versión G-Power ha cambiado todo el sistema de admisión del auto, así como escapes y sobrealimentación, además agregó elementos de competición como la bomba de combustible, filtros y claro la gestión electrónica fue modificada.
Otro elemento que proviene de las carreras es el sistema de frenos, la versión GTS ya tenía frenos carbón-cerámicos, los cuales mantiene aunque se mejora el trabajo de suspensión y fuerza de frenado para mejorar el control.
Los cambios mecánicos anteriores llevan al GTS de los 450 hp hasta los 650 hp, sin duda el bramido del V8 debe ser inquietante. Y todo esto traducido a rendimiento hace que el BMW tenga una aceleración de 0 a 100 en 4.1 segundos y de 0 a 200 en 11.8 con una velocidad punta de 323 km/hr.
Por último cabe destacar la decoración que tiene sobre ese tono amarillo que está de moda, calcomanías de la carrera Gumball 3000, que alguna vez fue proscrita e ilegal y ahora se ha convertido en un evento “del socialité”, aunque no deja de sorprender el nivel de autos y preparaciones que se dejan ver.
Cuenta cuentos profesional, con un especial gusto por la velocidad, y una calma innata por vivir mientras el mundo gira a prisa. De gustos extremos nacidos en el ciclismo y luego evolucionados al mundo motorizado. Aquel que puede pasar horas viajando en una carretera o un instante en las pistas de competencia, aunque viviendo, volando y dejando todo problema en el camino en mi motocicleta. De gustos particulares y enemigo de los autos aburridos que no transmitan sensaciones de manejo.
