En conclusión del sexagésimo aniversario de la marca francesa, la firma se asoció con el centro de diseño de movimiento TheArsenale para crear el Renault AIR4. Este showcar ofrece una reinterpretación futurista del tradicional 4L de la marca, un coche sencillo, eficiente y versátil.
Este ícono de la marca, sobre todo dentro de las jóvenes generaciones de automovilistas iniciando la década de los 60, en esta ocasión se reinventó por completo. Este nuevo coche está diseñado para literalmente volar sobre nuestras cabezas.
Renault AIR4 mantiene esas mismas líneas y masa contenida del 4L original pero presenta capacidades dinámicas nunca antes vistas. El coche está fabricado íntegramente en fibra de carbono. La rigidez se ha revisado por completo para incluir conceptos de empuje y sustentación para mejorar y afinar su tiempo en vuelo.
Para conducirse, AIR4 no cuenta con ruedas. En su lugar, vemos cuatro hélices de dos palas, una en cada esquina del vehículo, haciéndolo lucir muy cercano a un drone. El chasís se encuentra en el medio del marco giratorio y el conductor podrá acceder a la cabina utilitaria del vehículo con tan solo levantar la carcasa con bisagras en la parte delantera.
El Renault AIR4 funciona con baterías de polímero de litio de 22,000 mAh con una capacidad total de 90,000 mAh. Esto se traduce en una velocidad máxima horizontal de 26 metros por segundo, con inclinación de 45 grados en vuelo y una inclinación máxima de hasta 70 grados.
AIR4 podrá volar tan alto como 700 metros con una velocidad de despegue de 14 metros por segundo, retenido a 4 metros por segundo por razones de seguridad. Por último, AIR4 ofrece un empuje vectorial máximo de 380 kilogramos, es decir, 95 kilos por hélice.
Renault AIR4 es producto de la colaboración con TheArsenale a partir de defender que los automóviles son símbolos culturales. Es el primer producto de la división ROAD TO AIR de TheArsenale que prevé una futura red de transporte por los cielos.
Después de su presentación digital, saldrá el coche a la exposición pública el día de hoy en el centro de Paris junto con otras versiones históricas del Renault 4. Se presume que el siguiente lugar donde aterrizará este histórico vehículo es Miami y eventualmente Nueva York. Solo nos queda una pregunta por resolver. ¿Algún día se convertirá en un vehículo de producción?
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