Suzuki Swift Sport 2019 es el mejor auto que le he conocido a la marca. Y lejos de que a mi afirmación le gane el sentimiento por la emoción de conducir un deportivo de estas características, Suzuki realmente ha especificado un buen producto para el mercado mexicano.
La vara estaba muy alta luego de conocer la versión de tres cilindros Boosterjet, y de reconocer el buen trabajo que hacía el Sport de la generación anterior, la cuarta. Este ejemplar, quinta, tenía esa expectativa tamaño cielo por parte de los entusiastas.
La manera en que decidieron perfeccionar este automotor que, a su vez, es objeto de culto, fue incrementando la potencia y la reacción del motor. Para ello optaron por incluir un bloque turbo de 4 cilindros con poco desplazamiento para minimizar el turbo-lag y reducir el peso total de la unidad. Así, Suzuki Swift Sport es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en tan sólo 8 segundos. Y además continuar haciéndolo sin mayor esfuerzo, con aplomo en el asfalto y sin consumir demasiado carburante.
Swift Sport eroga 138 hp y 170 libras pie de torque a las ruedas delanteras gracias a un par de transmisiones opcionales: manual de 6 cambios (versión testada) y automática de 6 relaciones con paddle shifters al volante. La ecuación de adrenalina se complementa gracias a su peso mínimo, pues con 970 kilogramos la báscula apenas se mueve cuando uno ya alcanzó un nivel de rendimiento extraordinario.
El interior luce sofisticado y deportivo, con un tinte juvenil muy bien logrado a partir de una buena selección de materiales. El sistema de infoentretenimiento es compatible con Apple CarPlay y Android Auto, mientras que la pantalla táctil es de 7 pulgadas y el sonido cumple con los exigentes gustos de la audiencia a la que se dirige.
Posee 6 bolsas de aire, las cinco plazas cuentan con cinturones de seguridad de 3 puntos. Mientras que los frenos, de disco ventilado al frente y sólidos atrás, tienen sistema ABS, Control de Estabilidad y Asistente de Frenado. La carrocería está diseñada de manera inteligente para deformarse de manera progresiva a fin de proteger a los tripulantes y disipar la energía consecuencia de un impacto.
Con el sello de la casa el vehículo se ofrece en una paleta de colores específica para la versión más dinámica de Swift. Monta rines de 16 pulgadas y la fascia y parrilla han sido diferenciadas. El toque final lo proponen un alerón trasero y paquete aerodinámico que simula estar construido en fibra de carbono.
En la prueba logramos superar los 14 kilómetros por litro, sin necesidad de cuidar demasiado la aceleración. Sin embargo el tanque rendirá, como en todos los casos, según le guste o no correr al propietario. El manejo es sólido, firme pero no cansado. Afortunadamente el perfil de neumáticos, ajuste de la suspensión y dirección son tan dinámicos como confortables, por lo que es un excelente candidato como vehículo de uso diario.
El precio es sumamente atractivo tomando en cuenta lo que ofrece, y es que la versión manual cuesta 309 mil 990 pesos. Mientras que la automática con paletas de cambios al volante llega en 324 mil 990 pesos. Los rivales son Polo TSI, Ibiza FR y Peugeot 208 GT.
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