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El primer automóvil fabricado y registrado en una línea de montaje.
Ford Model T fue diseñado por Henry Ford, y fue uno de los automóviles más accesibles de su época, iniciando producción en 1908.
Este modelo fue famoso por ser el primer automóvil fabricado y registrado en una línea de montaje. Además, de mostrar una perfecta combinación de hombre y máquina. Su precio asequible, producción masiva y motor de cuatro cilindros con 20 caballos de fuerza, lo hicieron un ‘hit de ventas’.
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Model T apenas alcanzaba una velocidad máxima de 71 km/h, y además de convertir a Ford en el primer fabricante americano antes de 1910. Destacaba por tener un volante magnético; el cual, el fabricante elegía su posición, ya sea a la izquierda, derecha o al centro. Y una caja de cambios de engranajes planetarios que solo contaba con dos velocidades y se cambiaba con el pie, concretamente con el pedal del embrague.
Las enormes ruedas del Ford Model T y su bien habida amplitud, le daban gran versatilidad, así que su popularidad no fue difícil de conseguir; y así posicionarse como el primer auto de producción mundial.
Para 1908, año de su fabricación, costaba poco más de 800 dólares, y se fabricaron 15 millones de unidades para 1927.
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