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Cuando Chrysler buscaba un diésel para sus camiones no había fórmula más ganadora que asomarse a Cummins
Zapatero a tus zapatos, y así lo entiende la industria automotriz; se trata de hacer sinergias a favor del consumidor 
final y de elevar el nivel de lealtad de los clientes por determinado tipo de productos. Si bien el motor HEMI de Chrysler ha sido una apuesta segura y altamente confiable para las pick up, cuando se trata de motores a diésel en camiones tipo pick up «heavy duty», acercarse a una compañía que goza de un prestigio por encima de la media era la solución lógica, justificable y apropiada.
Cuando Chrysler buscaba un diésel para sus camiones no había fórmula más ganadora que asomarse a Cummins, una compañía que cuenta con una legitimidad en este tipo de propulsores, a diésel, desde 1919.
Se trata de la utilización del Cummins 6.7 litros Turbo Diesel, que se encuentra animando a los camiones RAM 2500 y 3500 en los Estados Unidos, un motor en configuración de seis cilindros en línea, que entregará nada más y nada menos que 385 caballos, nada sorprendente, pero… ¡¡¡850 libras pie de torque!!! Mismas que harán que cualquier tipo de carga ceda ante la fuerza de torsión que presenta este corazón a diésel.
Asimismo, su mínimo número de componentes en comparación con un V8, 30% menos que la competencia en piezas móviles, favorece a su rendimiento y a un menor costo de mantenimiento, por lo que deberá revisarse cada 15 mil millas para un cambio de aceite, mientras que acoplado a la transmisión automática Aisin, gestionará los cambios de manera inteligente a fin de consumir mucho menor carburante. El propulsor cuenta con una capacidad de remolque insuperable, y finalmente mencionamos que el Cummins viene de serie con un freno de escape diésel Smart, que es el más poderoso en un camión de servicio pesado, por lo que imagínese lo que no hará por su automotor, que además entrega la mejor economía de combustible, y como todo Cummins desde 1940, ofrece una garantía de 100,000 millas.
Finalmente debemos apuntar que esta motorización no está disponible en nuestro país, a cambio tenemos el V8 5.7 HEMI nada despreciable, pero habrá que ver si Chrysler hace posible la inclusión de este Cummins en su Crew Cab Heavy Duty de los siguientes años.
