La historia del superdeportivo Lamborghini Miura

Lamborghini Miura es aceptado como el origen del superdeportivo por lo que significó. Pero para poner en contexto, debemos entender el pasado de Ferruccio Lamborghini y probablemente su nacimiento. Que sucedió en Cento, Italia un 28 de abril de 1916 bajo el signo de Tauro.

Información astral que no parecería relevante si no fuera porque desde muy joven, la pasión por la tauromaquia invadiría las venas de nuestro visionario personaje. Y años más tarde, resultaría en la inspiración para nombrar a sus automóviles deportivos con el nombre de: toros, ganaderías o artículos inherentes a la practica del toreo, más allá de dotar a cada uno de sus bólidos del legendario escudo protagonizado por un toro de lidia.

La historia del superdeportivo, nace Lamborghini Miura

La historia no termina ahí, si usted observa un Lamborghini, se dará cuenta –inmediatamente– que son vehículos anchos, de siluetas poderosas y carrocerías robustas. Ya sea por beneficio de la aerodinámica o por inspiración en el Bos primigenius taurus, los vehículos son dignos “bravos” del asfalto, dotados de enormes motores y de un *trapío sobresaliente.

Usted perdone estimado lector, pero no podemos describir al siguiente ejemplar de la “ganadería” Lamborghini sin presentar esta introducción taurina. Y es que la creación y generación del primer superdeportivo estaba por ver la luz.

Su nombre es Miura y fue el tercer automóvil de la armadora italiana con sede en Sant´Agata Bolognese. Este vehículo revolucionó el concepto del bólido deportivo desde su presentación en el Salón del Automóvil de Turín en 1965, no solo debido a su diseño, sino a sus características técnicas, que comprendían: chasís de motor central, corazón de gran cilindrada, estructura rígida y ultraligera.

Leyenda taurina = leyenda del asfalto, Miura y su nombre

Su nombre Miura, fue inspirado por una de las ganaderías de bravo más reconocidas y, sin duda la más famosa a nivel mundial. Conocida como la ganadería de toros asesinos, se ubica en la finca de Zahariche en Sevilla, España, y da pie a un encaste de bravíos, es decir, un tipo de ganado poseedor de características muy particulares, mismas que permanecen desde su fundación en 1842. Juan Miura cruza 220 vacas con la ganadería Gil de Herrera y 200 vacas y novillos pertenecientes al rancho de José Luis Alvareda, todas procedentes de Los Gallardos en el Puerto de Santa María, provincia de Almería en Andalucía.

Dicho encaste posee características típicas de un bravo impactante: alto de agujas (pitones), agalgado (de alzada considerable), fino de piel y de enormes dimensiones.

Características de la ganadería de toros Miura

Su pinta o coloración de pelaje es cárdena, negra zaina, colorada y sarda –en su mayoría–. En la actualidad, pocos son los toreros que “le pueden” a un Miura, su enorme tamaño es por demás peligroso y además está la fama que le precede. Pues ejemplares de esta ganadería han dado muerte a figuras del toreo como: José Dámaso Rodríguez “Pepete”, Manuel García Cuesta “El Espartero”, Domingo González Mateos “Domingo Dominguín”, Faustino Posadas, Pedro Carreño, al torero Llusío y al reconocido –por muchos– como el mejor torero de la historia: Manuel Laureano Rodríguez Sánchez “Manolete”, en la plaza de Linares durante el mes de agosto de 1947. El toro que mató a Manolete llevaba por nombre “Islero” y fue también inspiración de un vehículo Lamborghini producido entre 1968 y 1970.

Fabricación: 1966 – 1972 (764 automóviles fabricados): P400, P400S, P400SV, P400 Jota, P400 SV/J)

Motores: V12 de 3.2 litros a 4 tiempos; 4.0 litros y 60° de 350 a 385 CV según las versión, cuatro carburadores Weber y doble árbol de levas en cabeza con 2 válvulas por cilindro.

*Término que se ocupa para la clasificación del tipo del animal según sus características físicas, debe poseer la musculatura suficiente de acuerdo a su edad, pitones bien desarrollados, morrillo alto y silueta intimidatoria y seria.

ESCRITO PORMarco Alegría

Entusiasta de la comunicación y la actividad del periodismo ejercidos con profesionalismo. Manejo desde los 13 años, pero –en la actualidad– sigo jugando a los carritos.